Luego de la botella de alcohol etílico tamaño familiar, y el pervinox incoloro, pero no insípido, fue hora de tragar el algodón.
Logré con mucho esfuerzo, pasarlo. y en mi cabeza sólo repetía una cosa "hay que curar la herida interna"
Luego de este arduo y nada divertido trabajo, pensé cómo harían todas esas sustancias para llegar a sanar al corazón, y al rincón mas profundo de mi alma. y esperé.
Porsupuesto, aún veo secuelas, creo que voy a estar un tiempo en tratamiento antes de sanar.
Y si sigue doliendo tanto como hasta el momento, creo que dispondré mi suerte, me la juego en la mesa. A todo o nada... a seguir esperando
cuantO tiempO más llevará?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 entes comentaron aqui:
muy lindo, muy inocente y a la vez muy conciente. me gusta muchisimo como escribis!
Simple y hermoso...
Lastima que es más dificil curarse el alma!
Besos
Hola! me gusta mucho tu blog, así que me voy a leer unas cuantas entradas más.
Llegué acá porque me llamó la atención tu nombre de usuario, es una canción que me trae muchos recuerdos.
Te mando un abrazo!
Publicar un comentario